Merenptah
1213 – 1202 a.C.
|
Merenptah Hotephermaat Amado de Ptah, Gozo de la justicia (Maat)
Baenre Meryamón Espíritu de Ra, Amado de Amón o Merenptah (Merneptah,
Menephta, Meneftah, Mineptah) es el cuarto faraón de laXIX dinastía,
décimo tercer hijo deRamsés II, con 60 años es vencedor de los
pueblos del mar (griegos, micénicos, filisteos, frígios, ... y libios). |
|
Los doce hijos mayores del prolíficoRamsés II murieron antes que
su padre; por ello fue el décimo tercero, Merenptah, casado con Istnofret II, quien subió al
trono en el año 1225 a.C. Difícilmente puede ser casual el que no se conserven escenas de
batallas comparables a las de su padre y su abuelo; como tampoco hay grabados de ningún hecho
histórico que se le pueda atribuir, es probable que él no guiara personalmente a su ejército,
sino que dirigiera las operaciones desde su residencia del Delta llamada ahora, después de la
muerte de su padre, Casa de Ramsés, Amado de Amón, el Gran Espíritu de Ra Harachte. Los hititas, por el extremo norte, no eran ya un peligro; su poder estaba en declive. Durante el reinado deRamsés II sus campos se habían visto azotados por años de malas cosechas y Merenptah hubo de enviarles de nuevo barcos con cargas de grano. El peligro que esta vez amenazaba a Egipto procedía del oeste. Durante generaciones, los libios habían ido cruzando la frontera occidental e introduciéndose como emigrados en el Delta, donde los egipcios habían abandonado grandes terrenos de pastos dejándolos a los recién llegados. En el reinado de Merenptah la penetración libia alcanzó el canal que parte del Nilo, desdeHeliópolis, en dirección nororiental. Ahora había tiendas libias plantadas frente a la ciudad deBubastis, e inclusoHeliópolis yMenfis corrían peligro de quedar sumergidas por oleadas de libios. |
|
Durante el quinto año de Merenptah hubo noticias de un vasto movimiento del pueblo de Libu, que más tarde
dio su nombre a Libia y que con ello aparece por primera vez en la historia. Los mandaba su jefe Marayey,
hijo de Did, al que acompañaban sus doce mujeres y sus hijos, lo que indica a todas luces su intención de
establecerse permanentemente en Egipto. Con él estaban aliados no sólo los meskhenet, otra tribu libia que
ya conocían los egipcios por anteriores choques, sino también las gentes de Luka, Sharden, Akiwasha, Tursha
y Sheklesh. Los luka y sharden ya habían sido aliados de los hititas contraRamsés II
en la batalla de Kadesh, y por aquel entonces debieron habitar las costas meridionales de Asia Menor. Al
igual que los akiwasha, tursha y sheklesh, en este momento se dirigían hacia el oeste cruzando el Mediterráneo,
con el fin de unirse a los libios en un intento de invasión de Egipto. Debido a la semejanza de sus nombres
se cree que los luka son los primitivos licios, y los sharden, akiwasha, tursha y sheklesh se han identificado
con los sardos, aqueos, tirsios (etruscos) y sicilianos. Esta identificación ha sido puesta en duda por algunos
especialistas, pero tan gran semejanza de nombres difícilmente puede ser fortuita. A esta mezcolanza de pueblos
aliados se le llamó Pueblos del Mar. |
|
Las primeras noticias de esta amenaza procedente del oeste llegaron a Merenptah
durante el segundo mes de la estación de verano; inmediatamente comenzó éste a reunir un gran
ejército, tanto de infantería como de carros. El primer día del tercer mes del verano ya estaba el enemigo en la frontera occidental de Egipto, cerca de la ciudad de Pi-ire, cuya posición exacta no se ha logrado fijar aún. El ejército egipcio le atacó dos días más tarde y tras seis horas de batalla le derrotó. El jefe Marayey pudo escapar, pero abandonando todas sus posesiones, incluso sus sandalias, su arco y su carcaj. Sus mujeres fueron capturadas y seis de sus hijos perecieron en la batalla. En cuanto a él, al abrigo de la noche, pasó ante la Fortaleza del Oeste y volvió a su país, pero más tarde el comandante de la fortaleza notificó que los libios habían nombrado jefe a uno de sus hermanos y que no se sabía si él estaba vivo o muerto. |
El descontento de los libios con Marayey es muy comprensible si sus pérdidas y las de
sus aliados corresponden a las que dan los egipcios. Según estos últimos, fueron capturados unos
9.000 hombres y unos 6.000 cadáveres cubrieron el campo de batalla. A la residencia del faraón se
llevaron las manos y órganos genitales de los muertos y al salir aquél a la ventana se le presentaron
como prueba de la victoria. Esto confirma la conjetura de que el rey no había tomado parte activa en
la batalla. Un año más tarde el virrey de Nubia, Mesuy, el Hijo del Rey de Kuch según título oficial, hizo componer y grabar una inscripción laudatoria de la victoria de Merenptah sobre los muros a la entrada de los templos de toda su provincia. |
|
|
Nos han llegado cuatro versiones fragmentarias de esta inscripción en los Templos
de Vadi es-Sebua, Aksha y Amara; se puede reconstruir el texto prácticamente completo, y gracias
a él se han conseguido algunos detalles complementarios, especialmente en lo que se refiere al cruel
destino de los prisioneros, que fueron empalados al sur deMenfis. No
parece probable que se les trasladara a tanta distancia con este solo objeto y quizá se pueda suponer
por esta razón que el campo de batalla de Pi-ire no se encontraba lejos de allí. En tal caso, los
libios no llegaron a Egipto desde el oeste del Delta, sino que, evitando las fortalezas fronterizas,
atravesaron el desierto y entraron en Egipto por algún lugar situado entre
el-Fayum yMenfis. El trato inhumano dado a los prisioneros, sin paralelos
en la historia egipcia, sólo se puede explicar como castigo por los crímenes cometidos contra la pacífica
población campesina egipcia cuando (éstos) pasaban su tiempo yendo de un lado a otro de la tierra en la
lucha cotidiana por llenar sus cuerpos, como pone en la inscripción de Merenptah en Karnak. El panegírico de Mesuy contiene referencias a las medidas punitivas que se adoptaron en Nubia, probablemente con motivo de rebeliones locales, pero no da más detalles. Más importante es el calificativo que da a Merenptah de sojuzgador de Gazer, ciudad de Palestina; la intervención militar de Merenptah en este país está confirmada por la estela de granito del rey descubierta en 1896 en su templo funerario, enTebas. Aunque la finalidad principal de la inscripción es exaltar la victoria del rey sobre los libios, pues está fechada el mismo día de la batalla de Pi-ire, las frases finales contienen interesantes referencias a la situación en Asia: Azotan a Canaán todos los males, se ha tomado Ascalón y sojuzgado Gazer, se ha hecho que Jenoam parezca no haber existido nunca, Israel está asolado y no tiene grano, Kharu (Palestina y Siria) ha pasado a ser viuda de Egipto. |
|
Por contener la mención más antigua fechada del nombre de Israel, única conocida
hasta ahora en los textos egipcios, la inscripción se ha hecho famosa como Estela de Israel, tanto
más cuanto que muchos especialistas habían pensado que Merenptah era precisamente el faraón del
Éxodo. Se ha intentado explicar de diversas formas la presencia de Israel en Palestina en los
primeros años del reinado de un rey del que se dice en la narración bíblica que murió con su
ejército cuando perseguía a los israelitas que abandonaban Egipto. Sobre la estancia de los israelitas en Egipto y sobre su éxodo no hay información en las fuentes egipcias, ni siquiera alusiones a ella. Como en el relato bíblico se dice que los judíos trabajaron en la construcción de la ciudad de Ramsés, que evidentemente recibió este nombre de un rey Ramsés, se solía concluir que el faraón opresor era el gran constructorRamsés II, y su sucesor Merenptah el faraón del éxodo. Se vio claro que éste no podía haber muerto en el mar cuando en 1898 se encontró una momia depositada en la tumba deAmenofis II (KV35 ) delValle de los Reyes. |
|
|
El nombre de la ciudad, Ramsés, claramente idéntico al de la residencia del Delta
Pi-Ramsés, sólo prueba que la narración bíblica se compuso después del reinado
deRamsés II; otros nombres egipcios contenidos en la historia de José
son sumamente tardíos y muestran que la historia no pudo escribirse con anterioridad a los siglos
X o IX a.C. Por tanto, los especialistas del Antiguo Testamento y los egiptólogos, según sus creencias
religiosas, mantienen posturas que van desde la aceptación del relato bíblico en todos sus detalles
como literalmente cierto, hasta la de considerarlo un puro invento. Aquí, como sucede con frecuencia,
la verdad parece estar en algún punto intermedio. Aunque no es posible aceptar el relato al pie de la
letra, es igualmente difícil descartarlo enteramente por falta de base histórica. Parece que la presencia
de los hicsos, un pueblo de evidente origen asiático, y su expulsión a comienzos de
laXVIII dinastía, constituye una base suficiente para la posterior elaboración
de la historia de la estancia en Egipto y del éxodo de los israelitas. En la Biblia no hay más rastro
del reinado de Merenptah que dos referencias al nombre de un lugar al noroeste de Jerusalén fuente de las
aguas de Neptoah en donde estaba la fuente de Mineptah, olvidada e ignorada durante mucho
tiempo, en la época de Merenptah la guardaba una guarnición egipcia. |
|
Merenptah dejó muy poco en el propio Egipto, excepción hecha de una tumba
enTebas, laKV8 delValle
de los Reyes. En 1898 descubrieron su momia junto a otras 18, dentro de la
tumba-escondrijoKV35, deAmenofis II.
Su templo funerario ha desaparecido prácticamente. En muchos lugares se contentó con añadir
su nombre a monumentos que ya existían. De su palacio se conserva un trozo
enMenfis. |
|